La reciente historia de La Hija de Dios es tan curiosa como su nombre. Ya vimos que allá por 1913 el coto redondo que formaban estas tierras se alquilaba a unos colonos, gracias a un contrato de arrendamiento que adjuntamos. Pues bien, este nuevo contrato, de 1941, representa otro hito histórico en nuestra línea temporal.Sigue leyendo «Documentos históricos: Contrato de compraventa (1941)»